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ORACIÓN A SANTA TERESA DE ÁVILA |
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“Nuestro Señor pide y ama las almas valientes pero humildes.
En la vida espiritual es necesario emprender grandes cosas.”
(Santa Teresa de Ávila)
Oh Santa Teresa de Ávila, que en la oración
alcanzaste las más altas cumbres de contemplación de Dios,
concédenos la gracia de aprender a rezar
con constancia, alegría y amor, para poder crecer
en la amistad con el Señor, que nos hace sentir hijos amados y perdonados.
¡Haz que no pase ni un día de nuestra vida
sin el don de la oración!
Tú que has querido vivir tu vocación religiosa
de modo radical, ayuda a los que han sido llamados
a seguir a Jesús a dar todo, sin compromisos, con entusiasmo y fidelidad.
Protege especialmente a los sacerdotes,
los consagrados y consagradas de la Comunidad
para que sean hombres y mujeres enamorados de la oración
con la verdad en el corazón y valerosos en la caridad.
Ayúdanos, a menudo corriendo y preocupados,
a repetir con fe la invocación que tú amabas:
“Nada te turbe, nada te espante. ¡Quien a Dios tiene, nada le falta!
¡Nada te turbe, nada te espante: solo Dios basta!”
¡Santa Teresa de Ávila,
Ruega por nosotros!