Oración a San Juan Diego

Tú, que siendo un humilde indio,
fuiste elegido por Nuestra Señora de Guadalupe
como instrumento
para mostrarle al mundo que Dios ama a todos los hombres,
haz que veamos la presencia de Dios
en el rostro de cada hermano.

Tú, que recibiste de la Virgen el mensaje:
“No te aflijas por nada, ¿no estoy aquí yo que soy tu Madre?”,
ayúdanos a aceptar libremente las preocupaciones
y a confiar serenamente nuestra vida
en las manos de María Santísima.

Protégenos y socórrenos,
para que tengamos siempre la mirada fija en Jesús,
camino, verdad y vida.

¡San Juan Diego,
ruega por nosotros!