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15 Años en Perú!! |
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Perú, abril 2020
Queridísimos cenacolinos,
Les escribimos desde Perú en este tiempo de cuarentena que nos lleva a vivir todo un poco más “interiormente”, no solo porque estamos todos en casa, sino porque también sentimos que Jesús está más cerca que nunca.
Sin duda que todos vivimos una Cuaresma más rica, con la posibilidad de rezar mejor, más y por todos y una Pascua más verdadera. El Obispo de Lima nos dijo: “Cómo podemos decir que Jesús no ha resucitado y no camina con nosotros, si por las calles hay quien protege nuestra vida, la limpieza, la seguridad y en los hospitales enfermeros, voluntarios, que sirven, cuidan, ayudan, por las calles los sacerdotes y los consagrados clasifican la providencia…este es Jesús que está cerca y camina con nosotros. ¡ÉL HA RESUCITADO!”
Les contamos de nuestras misiones aquí: Villa, Rayo y Supe, como estamos viviendo el día a día, sobre todo para agradecer a Dios porque el 23 de abril de 2020 hemos festejado los 15 años!!! ¡¡Qué bella historia!! Comenzamos de los más jóvenes a los más grandes…desde el último hijo nacido en Supe…pasamos por Rayo…y al primero, Villa!
SUPE
El domingo de Ramos, gracias a los padres ya los responsables de los coloquios, logramos hacer una videoconferencia en Zoom y nos encontramos todos, las familias, los chicos y algunos de nosotros, para rezar el Rosario, luego hacer la procesión del Domingo de Ramos en el desierto, escuchamos una catequesis de Padre Stefano, alguna intervención de Domenico, de Hermana Mari y de Hugo, y también compartieron algunos padres. Fue muy bello ver los ojos de los padres al comienzo del encuentro y al final. El comienzo fue dubitativo e inseguro, conocerse a través de una pantalla de computadora, encontrarse con rostros nuevos, y otros ya conocidos, y después los ojos luminosos y felices por el momento vivido juntos, por haber saludado a los hijos, verlos sonreír ¡y también intercambiar alguna lágrima de alegría y dolor! Agradecemos a los padres responsables de los coloquios por su esfuerzo, su estar siempre, por su corazón enamorado de la Comunidad!
En Supe la Cuaresma fue un tiempo fuerte, todos los jóvenes vivieron las situaciones comunitarias de siempre sin lamentarse, con más amistad y ayuda fraterna. Este año fue fuerte y significativo el lavatorio de los pies, que lo hicimos entre nosotros, un gesto de amor que dejó en nuestros corazones un signo de cercanía. El Viernes Santo, luego del Via Crucis caminando por la montaña de arena hacia la cruz, fue el momento de entregar nuestras heridas, cruces y fatigas a Jesús. En la cumbre, cada uno abrazó la cruz y permaneció un momento en silencio a los pies de Jesús …este gesto dejó mucha paz en nuestros corazones ,y cuando bajamos, las situaciones entre nosotros ya habían pasado, los ojos más brillantes, más limpios, para vivir el Domingo de Pascua con mucha alegría!!
¡¡Damos gracias porque nos sentimos muy amados y cada vez más resucitados!! ¡¡Gracias!!
RAYO DE LUZ
En la misión de Rayo de Luz la Cuaresma comenzó con la cuarentena por el coronavirus. Al principio fue desconcertante, no sabíamos bien qué hacer, pero luego llegaron las indicaciones de Italia y nuestros responsables, Andrea y Domenico, nos daban información para explicar las normas y comprender cómo organizar la vida de todos nosotros, niños, misioneros y familias.
El primer punto fue sin lugar a dudas la oportunidad única de no poder salir de casa y limitar muchas actividades que nos tenían afuera mucho tiempo. En seguida decidimos hacer una Adoración perpetua y todos podíamos hacer la adoración por turnos para agradecer el don de la Eucaristía y rezar por todos, así que para nosotros fue una Cuaresma intensa y bendecida que nos dio la oportunidad de regresar al Padre y estar más con Él. Mientras tanto, la vida misionera, aunque cerrada en una hectárea, continuaba sin cesar ni un instante.
La escuela, las tareas, las medicinas, la panadería, 45 niños, vida, vida y tanta vida. Al principio estábamos preocupados por los remedios, que para algunos niños son de vital importancia, y con el hospital cerrado al público no sabíamos qué hacer, pero después vimos que Él piensa en todo. Nos empezaron a llamar varios doctores del hospital para decir cómo podían ayudarnos, nos pareció un sueño pero no, todos se preocupaban por nuestros niños y por nosotros. Desde ese momento tuvimos todas las medicinas que necesitábamos, en abundancia y sin salir.
La Providencia también era una problemática que se resolvió gracias a muchos amigos que colaboran y nos ayudan, también Caritas nos dona víveres. También la escuela…fue un desafío hacer de maestros y profesores a 45 niños, más las videoconferencias, whatsapp, tareas, llamadas desesperadas a los profesores para hacerles explicar matemática, zoom, que es un programa en el que toda la clase está conectada y hace las lecciones virtuales…
Todo el día estamos corriendo tras estas cosas y se disolvió la idea de que la cuarentena podía ser una gracia para relajarnos y descansar. De todos modos estamos super felices, llenos de ideas, llenos de energía, de ganas de hacer caridad entre nosotros y de hacer cosas que nunca podíamos hacer.
Por ejemplo, una noche los adolescentes nos hicieron una cena y juegos a los misioneros …otra vez, las chicas cocinaron ñoquis e invitaron a las familias a comer. En fin, cosas extras que en la vida de todos los días jamás lo hubiéramos hecho.
En fin, en todo el mal que trae este virus, nosotros queremos ser un signo de luz y de vida, nada puede apagar el amor, la amistad, el darse, el quererse bien. Lo experimentamos con nuestros niños que al final piden solo esto: que los amemos y que estemos con ellos, con nuestros límites y cansancio pero con buena voluntad. GRACIAS
VILLA EL SALVADOR
Aquí estamos, en “el mejor lugar del mundo”, para agradecer a Dios por estos 15 años de VIDA PLENA, de misioneros que pasaron por aquí, niños, familias, hermanas amigos, vecinos, padres, hermanos, sacerdotes, ¡cuánto habría para contar!
En este tiempo nos sentimos afortunados, más en comunión con todos los que están en el sufrimiento y en el dolor por todos los países más golpeados y que no nos dejan indiferentes sino que nos empujan a arrodillarnos, a redescubrir el valor poderoso de la oración, de una llamada al que sufre, de un mensaje, una palabra de consuelo, una video llamada, o en compartir como podamos la Providencia que llega y por la que agradecemos infinitamente al Padre del Cielo que siempre es fiel. Gracias a Gina, nuestra vecina y amiga fiel, podemos compartir con los enfermos más necesitados lo que generosamente nos donan. Nos sorprende y asombra siempre cómo los peruanos se apresuran a ser solidarios en la necesidad; la Caritas, los sacerdotes, las Casas Hogar todos en reunión y comunión, los grupos de amigos que colaboran…solo podemos agradecer…de verdad, como nos lo ha enseñado madre Elvira que ¡¡DIOS NO ESTÁ EN CRISIS NUNCA!!
También nosotros estamos bien con los pequeñitos, viviendo tranquilamente la vida con ellos, mirándolos más a los ojos, jugando y volviendo a ser niños con ellos, así como la amistad y el compartir entre nosotros, la creatividad se enciende.
Para el aniversario organizamos una fiesta interna, con globos, fotos, guirnaldas, las tías hicieron la representación del Buen Pastor y las ovejitas con los niños más grandes…que tienen entre un año y medio y dos y medio. Son pequeños pero era conmovedor y simpático verlos a todos vestidos de ovejitas.
Un sacerdote amigo, el Padre Henry, celebró la Santa Misa en diretta por nuestro aniversario, recordando a todos, niños, tías, familias, hermanas, Madre Elvira.
Después un buen almuerzo y una buena torta hecha con amor y una bella Adoración nocturna desde el techo, entre luces y estrellas, NUNCA habíamos visto tantas! Delante de Jesús entregamos todo y todos recordando las adoraciones y bendiciones a nuestros niños con nuestros sacerdotes–tantas veces-, y todos los rostros que en estos años forman parte de esta historia. Justo el helicóptero de la policía en ese momento enfocaba su luz sobre nosotros. Se detuvo un momento porque no entendía qué hacíamos 9 mujeres de rodillas sobre el techo, cantando, con una luz que enfocaba algo, alguien, Jesús…luego cuando se dieron cuenta que rezábamos, hicieron un saludo y se fueron en paz.
Agradecemos tener la Misa en español los domingos, desde Pagno y las varias conexiones y encuentros , que seguimos como podemos, nos hacen sentir muy amados y cercanos a ustedes, experimentando la comunión con el Espíritu Santo que no tiene límites ni espacio. Agradecemos por el don de la salud nuestra y de nuestros niños, nuestro cotidiano de “madres y amas de casa” a tiempo completo no cambió mucho. ORA ET LABORA, nuestra oración es mejor, tenemos a Jesús aquí…así que SIN MIEDO…El nivel de stress, si queremos ver lo positivo de esta cuarentena, ha bajado muchísimo, no hay tráfico ni colas, no hay que hacer cola en el hospital para una visita ni en la farmacia, no hay reuniones en el Ministerio por los niños, ni damos vueltas por Lima para encontrar a los padres, ni los jueces tratan de mover las cosas para el bien de los niños, no hay visitas ni testimonios grupales que lleguen a casa.
La normalidad volverá un día y estaremos felices, ya que estos servicios nos llenan la vida y son para los demás, esperamos cambiar, que este tiempo de ORACIÓN INTENSA nos cambie por dentro, el corazón, la paciencia, la perseverancia, saber esperar, comprender, escuchar!
¡Gracias a todos por la unión en la oración, quedamos a la espera del Espíritu Santo en este tiempo de Pascua!
¡Gracias Madre Elvira por tu “si” a Perú, gracias a ti por esta historia fantástica que somos también nosotros!
¡¡Gracias Padre Stefano, El Perú te quiere y siempre te recuerda con el corazón!!
¡¡Los queremos!!!
La familia peruana